Nikola Jokic, uno de los unicornios de la liga, tiene todas las virtudes para hacer historia en la NBA. El sábado por la noche escribió una de sus primeras páginas gloriosas y quedó inmortalizado en los anales de la NBA: igualó a Wilt Chamberlain como el único jugador en la historia en completar un triple doble sin fallar un lanzamiento.
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El serbio obnubiló a la NBA en el triunfo de sus Denver Nuggets frente a Phoenix Suns por 119 a 91: anotó 35 puntos, capturó 12 rebotes y repartió 11 asistencias con una efectividad del 100% de cancha en 11 tiros (3 de 3 en triples).
Jokic plasmó en media hora por qué es un jugador especial: el centro de 23 años tiene el físico de un pivote, la habilidad y la visión de un base, la agilidad de un alero y el lanzamiento perimetral de un tirador. Su noche se cerró con todo el estadio cantándole MVP, una banda sonora que no parece una exagración.
El serbio igualó a Wilt Chamberlain, quien el 24 de febrero de 1967 en el encuentro entre los Philadelphia 76ers y los Baltimore Bullets, firmó una planilla de 42 puntosts, 30 rebotes, 10 asistencias y un 18 de 18 en tiros de campo. El récord de Chamberlain tiene un asterisco con respecto al de Jokic: por aquel entonces no existían los tiros de tres puntos.