New York Knicks sigue con su momento mágico: triunfazo ante Toronto Raptors y novena victoria consecutiva

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Leandro Fernández
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Julius Randle

Quién iba a pensar hace unos meses que New York Knicks iba a llegar al tramo final de esta temporada en medio de la mejor racha activa de la NBA, una racha que llega hasta las ¡9 victorias seguidas! Pero que quede claro: lo que se pensaba antes de este curso no tiene nada que ver con la realidad. El presente del conjunto de Tom Thibodeau está lejos de ser una casualidad. Los de la Gran Manzana son un equipo cada día más serio, compacto y peligroso, y tienen absolutamente justificado este gran presente, que se prolongó en el inicio de la jornada del sábado con otro contundente triunfo por 120-103 ante Toronto Raptors, que llevaba cuatro festejos en fila.

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Hay que viajar hasta el 2013 para encontrar una seguidilla semejante de los Knicks, cuando entre marzo y abril ganaron 13 encuentros en fila. Curiosamente, esa 2012-2013 fue la última campaña de la franquicia en los Playoffs, cuando aquel equipo que tenía a Pablo Prigioni en el plantel llegó a las Semifinales de Conferencia. La sequía de postemporada está camino a terminarse, ya que los de Thibs se encuentran en el 4° lugar del Este con marca de 34-27, medio partido por delante de los Hawks y con 2,5 de ventaja sobre el 7° pensando en el corte entre los que se clasificarán directo y los que irán al Play-in (7° al 10°).

Los Knicks tuvieron un aporte balanceado y contundente de varias individualidades, siempre con su All-Star como líder indiscutido. Sí, Julius Randle volvió a marcar enormes diferencias, mostrándose indomable para la defensa de los Raptors: 31 puntos (10-17 campo, 5-7 triples, 6-8 libres), 10 rebotes y una asistencia en 39 minutos. Claro que no fue el único: RJ Barrett mostró nuevamente su crecimiento (25 unidades, 12 tableros y 4 asistencias), Reggie Bullock sigue en alza como amenaza exterior (16 tantos, 3-7 triples), Nerlens Noel se asienta como el ancla defensiva (4 tapones) y el banco responde (43 puntos) con Derrick Rose como su incuestionable conductor (19 puntos y 7 asistencias).

Los de Nick Nurse tuvieron grandes tareas individuales de Fred VanVleet (27 y 11 asistencias), Pascal Siakam (26+7+5) y OG Anunoby (27 tantos, 6-11 triples), pero no encontraron respuestas defensivas ante un equipo superior (56% campo, 16-31 triples). Paso atrás de los de Canadá en la carrera por el Play-in (12° del Este con 25-35).

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La excelencia de Randle y el valor de los secundarios

Julius Randle

La primera mitad tuvo una tendencia clara: los Knicks estando un paso al frente, con mayor solidez, variantes y respuestas automáticas ante cada reacción de los canadienses. ¿El pilar? Sí, por supuesto que Randle. El interior respondió a cada desafío de la defensa. No importó si el rival estaba muy encima en la marca o si lo doblaban. Siempre una buena lectura y, sobre todo, siempre una resolución desde el drible. El ex Lakers dio una clase magistral para crearse lanzamientos desde la media y larga distancia.

Comenzó con 13 puntos (3-4 triples) en un primer cuarto en donde la ventaja no fue mayor (30-26) por el aporte de Siakam y Anunoby (17 combinados). En su descanso aparecieron los secundarios de los Knicks para ratificar la profundidad de la estructura de Thibs. Primero, un Rose sobrio, seguro e implacable cuando atacó el aro (12 tantos y 4 asistencias), luego Taj Gibson para dar su mano (7 unidades) como relevo interior, y más tarde una ráfaga de tres triples seguidos de Reggie Bullock para la máxima (55-46).

Cuando VanVleet amagó con la recuperación (12 unidades en 7 minutos del 2° cuarto), nuevamente Randle con sus apariciones. Cerró el primer tiempo con 20 puntos (8-11 campo, 4-5 triples), 6 rebotes y una asistencia, vital para el 64-59 parcial. Poca diferencia considerando el 61% de campo (10-17 triples) que lanzaron los Knicks.

Buena reacción tras un mal pasaje

Derrick Rose

El regreso de los vestuarios no fue el más productivo para los Knicks: 4 pérdidas en los primeros minutos que entregaron 7 puntos para los Raptors, dato clave para tomar la ventaja (70-69). El trío VanVleet, Anunoby y Siakam fue el que siguió sosteniendo a los de Nurse (22 de los 24 puntos en el tercero).

Sin embargo, los Knicks -una vez más- tuvieron respuestas. Otro ingreso productivo de Rose con su jerarquía (4), algunas apariciones de Barrett (8) y Randle manteniendo el pulso (8) y la defensa de Nerlens Noel como ancla (dos tapones) para recuperar la delantera al entrar al tramo final (89-83). 

El banco, la defensa y un cierre dominante

RJ Barrett

Todo equipo con aspiraciones necesita una segunda unidad capaz de producir. Y los Knicks demostraron que la tienen en un inicio de último cuarto matador: parcial de 14-3 en menos de 3 minutos, con Rose como líder junto a la personalidad de los rookies Quickley y Toppin (2) para clavar tres triples casi seguidos y llevar la diferencia a los 16 puntos (102-86). 

Ese parcial terminó siendo letal. No sólo porque RJ Barrett tomó la lanza en ataque (12 unidades), sino porque la defensa de los Knicks fue implacable ante los Raptors, dejándolos en un pobre 30% de acierto (6-20) en el último capítulo.

Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.

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Leandro Fernández

Editor Jefe de las ediciones en español de The Sporting News.