New Orleans Pelicans, una amenaza que asoma en la Conferencia Oeste

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Zion

Más allá del formato con el que se termine retomando la 2019-2020, no hay ningún equipo entre los que aún peleaban por clasificarse a Playoffs que represente un peligro mayor que los New Orleans Pelicans. En una temporada normal, serían exactamente la clase de conjunto que de alcanzar una octava posición, le podría traer más de un dolor de cabeza a un primer clasificado. 

Todas las pruebas apuntan a eso.

Para empezar, el récord de New Orleans es completamente engañoso. Su marca de 28-36 puede poco menos que descartarse a la hora de analizar su verdadero potencial. Hay diferentes razones para ello, pero la principal gira en torno a la explosión en escena de Zion Williamson.

En los 19 partidos que ha disputado, el rookie ha demostrado que todo el ruido que acompañó su llegada a la NBA fue jusiticado. En apenas 29,7 minutos por presentación, Zion promedia 23,6 puntos, 6,8 rebotes y un fenomenal 59% de campo

Aún cuando todavía no está ni asomando a lo que puede ser su techo como jugador, Williamson ya es uno de los jugadores más dominantes y efectivos de la liga, al menos en el costado ofensivo.

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Y cuando hablamos de dominio, no solo lo hacemos desde la óptica individual, sino sobre todo, desde el impacto colectivo.

Desde que Zion debutó el 22 de enero ante San Antonio, New Orleans tiene marca de 11 victorias y 9 derrotas, incluyendo un muy interesante 8-5 en sus últimas 13 actuaciones. Sin embargo, con eso no bastaría para justificar su etiqueta de amenaza para las potencias. Después de todo, estamos hablando de rivales que ganan por encima del 70% de sus partidos.

No... Lo que verdaderamente ilusiona a los Pelicans es lo que pasa cuando Williamson está en el terreno de juego. Algo que probablemente pasaría con mayor frecuencia en un regreso a la acción, teniendo en cuenta el tiempo de recuperación que ha tenido para una rodilla derecha que lo tenía con minutos restringidos.

En las 1233 posesiones en las que Zion ha estado en cancha, New Orleans le saca una ventaja promedio de 10,2 puntos a sus rivales por cada 100 jugadas. Su rating ofensivo es excelente, con 114 unidades, y el defensivo es aún mejor: 103,9 tantos. 

Igualmente, esa producción queda chica cuando lo comparamos con lo que sucede cuando el quinteto inicial (Ball-Holiday-Ingram-Zion-Favors) comparte el campo: un +27,2 puntos por cada 48 minutos, anotando 126,8 unidades y recibiendo apenas 99,6.

Detengánse un segundo en ese número: +27,2... estamos hablando de que si teoricamente, los titulares jugaran el partido completo, ganarían cada uno de ellos por casi 30 puntos de diferencia. 

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Esos números no solo son increibles, sino que son los mejores de toda la liga, por un amplísimo margen. Entre las formaciones que han compartido al menos 200 minutos, el +27,2 de New Orleans aventaja por una brecha enorme al segundo puesto, en manos del cinco titular de Milwaukee (+21,2). Tercero figura el Rubio-Booker-Oubre-Bridges-Ayton de Phoenix (+19,6), mientras que para conocer al cuarto hay que recurrir al Mitchell-O'Neale-Bogdanovic-Ingles-Gobert de Utah, con un +12,9. Bastante menos de la mitad que el mencionado de los Pelicans.

La prueba es lo suficientemente grande como para entender que esos números realmente significan algo. Cuando Gentry tiene a sus mejores jugadores en cancha, el equipo está pasando por arriba a sus rivales. Y si bien la poca profundidad de la banca es un problema aún sin solución, en unos eventuales cruces de Playoffs (o en partidos por ingresar a ellos), esto podría tener un impacto menor, al tipicamente acortarse las rotaciones de los equipos.

Está claro que la amenaza de los Pelicans no está solo justificada en esa bestia llamada Zion Williamson. A su lado aparece un All-Star como Brandon Ingram, uno de los jugadores más subvalorados de la competencia como Jrue Holiday y un base polifuncional como Lonzo Ball.

Además, aún con el poco tiempo que llevan jugando juntos, las estadísticas son concretas a la hora de marcar la química que ha encontrado ese quinteto, al que también se le suma un veterano rendidor como Derrick Favors.

Todavía no sabemos cómo ni cuando volverá la acción de la 2019-2020. Pero cuando lo haga, Zion y sus Pelicans están preparados para lastimar a quien tengan en frente.

Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.

Autor/es
Juan Estevez Photo

Juan es productor de contenido en las ediciones en español de The Sporting News.