Magia, véase "el arte o la ciencia oculta con que se pretende producir resultados contrarios a las leyes naturales". O también, "el encanto o atractivo de alguien". Cualquiera de las dos definiciones se aplican a Luka Doncic. Cualquiera. ¿Y qué es lo mejor? Que el próximo 12 de diciembre lo tendremos en los NBA México Games 2019, cuando Dallas Mavericks enfrente a Detroit Pistons.
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Incluso la RAE podría añadir una tercera definición y simplemente incluir "Luka Doncic" como significado o sinónimo de magia. Y en la Semana de los Crossover en la NBA, nada como recurrir a sus habilidades.
Luka ha dejado un festín de jugadas, highlights, destrozos y canastas imposibles en su primer año. Tantas que recopilarlas en un solo artículo es imposible. Tantas que lo mejor es disfrutarlo en directo. Es uno de esos jugadores por los que merece la pena poner tu alarma para disfrutar, sin importar la hora.
Porque Luka es magia. Y a más de un jugador le ha sacado un conejo de la espalda esta temporada.
Las fintas de primero de primaria
(Sí, no son crossovers al uso, pero estos detalles técnicos y de calidad merecen entrar aquí)
Un recurso tan simple como la finta. De lo primero que se aprende en el básquet. Y es uno de los recursos que más y mejor explota Doncic en la NBA. También es cierto que por su repetición es sencillo que los rivales estudien estos movimientos y estén atentos a saltar menos con él, pero eso abre un abanico de posibilidades de pases u otros movimientos.
A los Bulls los bailó con la finta del video de arriba. Lo mejor se lo llevó Rudy Gobert, que sigue sin saber qué sucedió en esa jugada.
Primero Kyrie, luego Smart
Dos de los jugadores con más calidad de los Celtics sufrieron en sus carnes a Lukita. La jugada sobre Irving es la más conocida. Al fin y al cabo el nuevo jugador de los Nets es una de las referencias por sus botes, engaños y fintas en la liga, y cayó como un rookie en la finta del esloveno.
El triple sobre Smart, uno de los mejores defensores de toda la competición, junta todo lo que es Doncic. Fluidez, control, habilidad y esa magia para un tiro imposible.
El uso del cuerpo
Esta jugada del esloveno tiene un detalle muy importante que pasa desapercibido. El uso de los pies y los ojos para engañar a Jerebko. Con ese movimiento ya engaña al jugador de los Warriors y rompe la defensa. Detalles de calidad.
Los step-backs y los crossovers
Los movimientos de la casa de Luka. Sus 'signature moves' ya están más que claros. Lee al rival, analiza la ventaja que tiene -porque Luka siempre tiene una ventaja- y ejecuta. Primera víctima, Enes Kanter. Desventaja de velocidad. Dentro y fuera, de manual.
Segunda víctima, Josh Okogie. Utiliza más su cuerpo y después algo poco usual para la NBA. Ante una jugada individual exquisita, opta por el pase en vez de por el tiro propio. Jalen Brunson falló, pero Luka dejó muy claro tras el partido que volvería a hacerlo. Al servicio del equipo.
Un movimiento muy Kobe para romper a uno de los mejores defensores de la NBA. De nuevo, otra ejecución perfecta y Paul George por los suelos.
A tal punto llegan sus step-backs que ya hemos visto debates sobre quién es el rey de este gesto, si James Harden o el propio Doncic. La Lukamanía está desatada.
El otro signature move
Si el step-back es su movimiento predilecto, el pase entre la espalda ofensivo para romper a dos rivales y cruzar entre ellos es otro de los recursos preferidos del arsenal del esloveno.
El gran final
Lo mejor se deja para el final, no podía ser de otra manera. En este video lo más destacado es el primer step-back sobre Clint Capela y, después, el segundo. Pero es que merece la pena ver el final completo.
Dallas perdía por ocho y el partido parecía ya cerrado. Houston se lo llevaba y Doncic tenía una noche mala en el tiro. En apenas segundos le dio la vuelta al marcador, se encendió y los Rockets no estaban preparados para esa aparición repentina.
Ocho puntos consecutivos y dos destrozos al pivote de Houston.
Porque eso es Luka. Movimientos imposibles, control total del tempo, una técnica de manual y dos o tres movimientos que son imparables. Luka Doncic es magia.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.