A diferencia de otros deportes, como el béisbol y el futbol americano, el número de películas de ficción sobre baloncesto es relativamente bajo. Muchas de ellas (otra vez, a diferencia de otros deportes), han sido más cómicas que dramáticas y se han enfocado más en las habilidades atléticas casi sobrehumanas de los jugadores que en contar historias de peso. Sin embargo, hay algunas que llenan todas las casillas correctas y que no sólo tratan de básquetbol, sino que lo llevan a otro nivel. Estas son 10 películas que no se puede perder cualquier aficionado al deporte ráfaga.

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Space Jam (1996)

No hay nada que diga “los noventa” como esta película (si no nos creen, visiten su sitio web, que ha permanecido intacto todos estos años), en la que los personajes de los Looney Tunes hacen dueto con Michael Jordan para derrotar a los malvados Monstars, quienes han robado las habilidades de jugadores de la NBA como Charles Barkley, Larry Johnson y Moggsy Bouges. Además de ser terriblemente divertida, contesta satisfactoriamente la pregunta “si el futuro de la humanidad estuviera en manos de un jugador, ¿a quién escogerías para ejecutar el último tiro?”. A MJ, sin duda.

Coach Carter (2005)

Inspirada en una historia real, Samuel L. Jackson da una clase de ética como Ken Carter, el entrenador de un equipo preparatoriano con gran capacidad atlética pero pobre desempeño académico. Carter impidió que sus estrellas jugaran hasta no elevar sus calificaciones y en el camino les mostró una que otra lección de vida sobre la importancia de la educación y la responsabilidad.

He Got Game (1998)

En una de las películas más intensas de esta lista, las actuaciones de Denzel Washington y un muy joven Ray Allen sobresalen. Dirigida por Spike Lee, He Got Game narra la relación entre Jesus Shuttlesworth, el mejor prospecto de preparatoria y, su padre, un criminal al que el gobernador le ha prometido dejar en libertad si convence a su hijo de enrolarse en su universidad. Ray Allen llegó a la NBA en 1996, un par de años antes de que la cinta saliera.

Love & Basketball (2000)

Aquí no hay campeonatos por ser ganados, ni canastas de último minuto, pero las lecciones de Love & Basketball, protagonizada por Sanaa Lathan y Omar Epps está llena de jugadas para el romance y la vida. Suena algo cursi, pero la interacción entre ambos dentro de la cancha es tan fluida que merece un triunfo.

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Hoosiers (1986)

Posiblemente la mejor película de básquetbol que se ha filmado, o al menos la más celebrada, Hoosiers refleja la esencia del juego como ninguna otra. Gene Hackman estelariza la cinta como Nomran Dale, un exentrenador colegial que recibe una segunda oportunidad para entrenar a una minúscula prepa en Indiana y los lleva a revivir viejas glorias. Sin duda, es la más inspiradora de esta lista.

Rebound: The Legend of Earl “The Goat” (1996)

Earl Manigault fue uno de los mejores jugadores de su época. Lamentablemente, nunca alcanzó su potencial debido a la cruda realidad que lo rodeaba y una adicción que lo limitó cuando estaba cerca de lograr sus sueños. Pero Rebound, en la que Don Cheadle interpreta a Manigault, se trata también de redención y encontrar nuevos caminos.

Glory Road (2006)

Basada en la historia real de la pequeña universidad de Texas Western y su camino hacia el torneo de campeonato del básquetbol colegial a mediados de los años 60, Glory Road refleja tensión racial de la época y la forma en que el coach Don Haskins (interpretado por Josh Lucas), cambiaron la mentalidad de muchos tras formar un equipo cimentado en el talento, el buen juego y la competitividad más que en la raza.

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Uncle Drew (2018)

Los talentos histriónicos de Kyrie Irving casi están al nivel de sus talentos dentro de la cancha. Basada en una campaña publicitaria en la que el jugador de los Celtics se hace pasar por un adulto mayor para competir en canchas callejeras contra jugadores jóvenes, Uncle Drew es una comedia que incluye también las actuaciones de Shaquille O’Neal, Reggie Miller, Chris Webber, Nate Robinson y Lisa Leslie, todos en maquillaje de veteranos.

Blue Chips (1994)

Regresando al lado serio, Blue Chips es un drama sobre la ética detrás del reclutamiento del básquetbol colegial y las tentaciones en las que entrenadores, atletas, universidades y todo un sistema puede caer con tal de ganar. Aquí empezó la carrera fílmica de Shaquille O’Neal, apenas un año después de llegar al Orlando Magic.

White Men Can’t Jump (1992)

Esta película incluye varias de las mejores secuencias de básquetbol en esta lista, y definitivamente inspiró a más de uno a salir a las canchas callejeras y empezar a jugar, no por dinero o por orgullo, como sucede en la cinta, sino porque se veía como una de las cosas más divertidas que uno podía hacer. Encima de eso, los personajes son profundos a pesar de ser una comedia, y las actuaciones de Wesley Snipes y Woody Harrelson son estupendas.

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