Mundial de Básquet 2019: La emoción de Manu Ginóbili y el abrazo con Luis Scola

Author Photo
Hug 3

Si uno no se había emocionado con la categórica victoria de la Selección Argentina sobre Francia por 80 a 66 , con una actuación para el recuerdo del treintinueveañero de Luis Scola con 28 puntos y 13 rebotes, lo sucedido al final, apenas consumada la clasificación al partido más importante del torneo, acabó con las esperanzas de cualquiera que pensaba que no derramaría una lágrima por un mero evento deportivo.

Emanuel David Ginóbili, un tal Manu, vivió el partido al costado de la cancha y sufrió como si nunca se hubiera retirado en aquellos Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016. Apenas sonó la chicharra final, y tras el saludo entre argentinos y franceses, Manu ubicó a Luis, su viejo amigo, su viejo compañero de Selección, de incontables pick and roll, de levantadas tras caídas, de victorias épicas, de emociones fuertes, de derrotas devastadoras. Lo encontró ahí, al costado del rectángulo, para pegarse un abrazo de esos que comienzan de manera violenta pero porque la fuerza es necesaria para expresarlo todo sin palabras. 


En ese abrazo se fundió un país. Un abrazo que contempló cómo sienten la camiseta dos de los máximos exponentes no solamente del básquetbol, pero del deporte de la Selección Argentina. Un abrazo para ver una y otra vez. Un abrazo para emocionarse. Un abrazo del alma.
 

Hug

Autor/es