México vs. Australia: el gurú del tiro, el Mano Santa y un partido único en la historia de los Juegos Olímpicos

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Guerrero

En el tercer partido de las Finales 2021 entre los Milwaukee Bucks y los Phoenix Suns presenciamos algo que no se había visto en los últimos 20 años de dicha instancia: dos jugadores de diferentes equipos alcanzando los 40 puntos en el mismo encuentro. Lo consiguieron Khris Middleton (40) y Devin Booker (42). ¿Los últimos que lo habían logrado? Allen Iverson (48) y Shaquille O'Neal (44) en el Juego 1 de las Finales del 2001 entre Sixers y Lakers. 

Con ese hito en mente y con Tokio 2020 a la vuelta de la esquina, nos surgió la duda. ¿Se vio algo así alguna vez en un Juego Olímpico? Y la respuesta es que sí, pero apenas en una ocasión. Y desde entonces ya han pasado 45 años.

Guerrero

La historia nos lleva a Montreal, Canadá, en la edición de 1976 de los Juegos. ¿Los protagonistas? Australia y México por el Grupo A. Para ambos se trataba de un partido importante, que dejaría al perdedor prácticamente sin chances de avanzar de ronda (se clasificaban dos en una zona donde también estaba un candidato como la Unión Soviética, además de Japón, Cuba y Canadá). Los oceánicos habían empezado con un par de duras derrotas: 111-89 ante Cuba y 93-77 ante los soviéticos. ¿México? Derrota en el debut ante la URSS por 120-77 y victoria clara al día siguiente frente a Japón, por 108-90.

Como vemos, dos equipos con mucho poder anotador, pero también enormes ventajas defensivas. Y vaya que eso quedaría reflejado en el cruce entre ambos.

El encuentro entre mexicanos y australianos fue extremadamente parejo. Los americanos se llevaron el primer tiempo por 58-57, con un marcador que dejaba a las claras el ritmo ofensivo de ambos conjuntos, mientras que Australia ganó el segundo por 50-49, empatando el marcador en 107 y forzando un tiempo suplementario.

Allí la ventaja fue para Australia: parcial de 13-10 y victoria por 120-117. Ambos quedaban entonces con marca de 1-2, la cual no les alcanzaría para meterse en ese Top 2 del grupo. La URSS desfiló con un 5-0 (+174 de diferencia) y Canadá lo siguió con un 4-1. Cuba terminó tercero con 3-2, Australia cuarto con 2-3, México quinto con 1-4 y Japón último con 0-5.

Pero más allá de todos estos datos colectivos, lo que realmente nos interesa de ese espectáculo anotador pasa por un par de rendimientos individuales. El máximo anotador del partido fue Eddie Palubinskas de Australia con nada menos que 48 puntos en 41 minutos, producto de un 20-24 de cancha y un 8-10 en libres. Ah y como si eso fuera poco, sumó además 6 asistencias.

Palubinskas

Tan buena fue la actuación de Palubinskas, que hasta hoy se trata de la segunda marca anotadora más elevada en la historia de los Juegos, solo por detrás de los 55 puntos que le anotó el brasileño Oscar Schmidt a España en 1988. De hecho, el Top 5 de puntos en los JJOO muestra cuatro veces a Oscar, con Palubinskas como el único colado en esa lista.

Pero Palubinskas no estuvo solo. Del otro lado apareció otra magistral actuación de uno de los mejores jugadores mexicanos de la historia: Arturo mano santa Guerrero. Un excelso tirador, que en esa jornada brilló con 40 puntos en 45 minutos, lanzando un perfecto 8-8 en libres y un 16-27 de cancha. No alcanzó para la victoria, pero sí para hacer historia, como el único partido en los Juegos Olímpicos que vio a dos rivales alcanzar los 40 tantos.

Guerrero es solamente uno de tres americanos en haber conseguido superar la barrera de los 40 puntos en los Juegos: Oscar y el gigante peruano Ricardo Duarte, los otros dos. Aunque curiosamente, esa no fue su máxima, sino que dos días atrás, en la victoria ante Japón, había conseguido sumar 41.

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La historia de ambos en los Juegos es extremadamente rica, apareciendo como dos de los mejores anotadores y tiradores que se hayan visto durante esos años de la competencia. Palubinskas figura 13° en la tabla de anotadores históricos con 409 puntos y un espectacular promedio de 25,6 unidades por encuentro. ¿Guerrero? Figura 35°, con 315 tantos y una media de 21 puntos.

Y si bien en esa época no había tiro de tres, su eficacia en libres demuestra por qué eran considerados dos tiradores absolutamente diferenciales: el 86,4% ubica al mano santa Guerrero sexto en la tabla histórica de porcentajes (mínimo 50 tiros libres), mientras que Palubinskas figura 12° con un 85%. Infalibles.

Tan eficaz era Palubinskas desde la línea, que protagonizó un par de situaciones interesantes relacionadas a ello. Formado en el básquet universitario estadounidense, llegó a liderar a toda la nación a mediados de los años '70, lanzando un 92,4% desde la línea cuando jugaba en el Ricks Junior College. Un rendimiento que eventualmente lo llevó a una universidad muchísimo más grande como LSU, donde brilló en dos temporadas: 18,6 puntos en la 1972-1973 y 18,3 en la 1973-1974, combinando casi un 88% en libres entre ambas campañas.

El otro dato curioso: luego de su carrera como jugador (llegó a ser drafteado por los Hawks en 1974, pero nunca jugó en la NBA), Palubinskas se transformó en entrenador de tiro y llegó a trabajar con Shaquille O'Neal en Los Angeles Lakers durante la temporada 2000-2001. Los entrenamientos con el australiano parecieron funcionar con el tiempo: Shaq lanzó un 51% en esa campaña, pero pasó a un 56% en la siguiente y un 62% en la 2002-2003, mejor porcentaje de toda su carrera.

Shaq

Hablando de los Lakers, cuenta la historia que Guerrero llegó a recibir ofertas para sumarse a los angelinos, como así también de parte de los Cleveland Cavaliers y los San Antonio Spurs. Sin embargo, como por aquel entonces los jugadores que formaban parte de la NBA no podían representar a sus selecciones en el baloncesto FIBA, finalmente el oriundo de Guanajuato no llegó a concretar su llegada a la mejor liga del mundo.

Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.

Autor/es
Juan Estevez Photo

Juan es productor de contenido en las ediciones en español de The Sporting News.