Lorenzo Mata representó una esperanza en el baloncesto mexicano. Fue uno de los jugadores que estuvo en la generación de los 12 Guerreros, consiguiendo una medalla de plata en los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011 en medio de problemas directivos y ganando el Premundial de Venezuela 2013 para clasificar a México a un Mundial por primera vez en 40 años.
En su etapa colegial en UCLA compartió cancha con jugadores como Russell Westbrook y Kevin Love, llegando a tres Final Four, pero el sueño NBA siempre quedó pendiente después de que anunciara su retiro a los 34 años.
Como profesional jugó en la Liga Nacional de Baloncesto Profesional con los equipos más importantes de la época, ganando cinco títulos, uno más en Cibacopa y otro en la liga de Puerto Rico.
“Mis intenciones siempre fueron jugar esta temporada, pero por el parón de lo que está pasando en el mundo y todo eso, me afectó por problemas que ya tenía en la rodilla. Intenté ir a entrenar, fui como tres semanas y no me sentía bien de la pierna, no sentía que podía seguir jugando a un nivel para competir en una liga como la de México. Fue ahí donde decidí hablar con el gerente, el entrenador y los dueños y decirles qué es lo que estaba pasando por mi mente”, mencionó El Matador en entrevista con NBA Global.
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Desde el 2014 cuando sufrió una rotura del ligamento cruzado en la rodilla derecha previo al Centrobasket 2014 y que fueran al Mundial de España, esa rodilla no lo dejó en paz y no volvió a ser el mismo. Sin embargo, está muy agradecido con el baloncesto por todo lo que le dio.
“Gracias por salvarme la vida. Desde pequeño empecé a jugar, organizado a los 14 y creo que si no hubiera encontrado el deporte del básquet no sé dónde estaría, no sé qué estaría haciendo. Al básquet le debo todo lo que tengo hoy. Conocí a todos mis amigos, mis hermanos por el básquet, conocí a mi novia. Si no hubiera sido por el básquet, toda la gente que me apoya y me quiero no la hubiera conocido”, apuntó.
El sueño NBA
Lorenzo Mata se graduó en el 2008 de la universidad y ese año participó en varios entrenamientos de Draft con al menos 11 equipos. Luego lo invitaron Los Angeles Lakers a la Summer League, en la que en cuatro partidos promedió 4,7 puntos, 6,5 rebotes y 1,2 bloqueos por partido en 18,8 minutos de juego.
Posteriormente los púrpura y oro le ofrecieron un lugar en el equipo de la G-League, pero como El Matador necesitaba apoyar a su madre, decidió empezar su carrera profesional con Halcones de Xalapa en México.
“Yo creo que sí (hubiera llegado a la NBA). Si hubiera trabajado un poco más fuerte, más duro. A lo largo de mi carrera uno aprende, conoce personas que los ayudas y al final aprendí lo de ser un trabajador, un jugador que siempre lo dio todo, dedicar mi tiempo al basquet y a mi cuerpo. Eso ya lo aprendí un poco tarde. Si lo hubiera aprendido desde joven, yo digo que no hay una duda de que sí hubiera llegado”, se sinceró. “Como todo basquetbolista el sueño siempre era llegar a la NBA, estuve cerca, pero al final por las lesiones y los tiempos no se dio”.
Pero hay un momento que marcó su carrera: una práctica de Draft con Boston Celtics. “Para mí fue uno de mis mejores entrenamientos que tuve del Predraft y para muchos jugadores como yo, no estás seguro que te van a draftear, tienes que ir a hacer todos los workouts que puedas. Hice un total como de 11, 12. Iba a Boston, a Houston y terminaba el entrenamiento, te bañabas y casi casi era directo al aeropuerto para volar a la próxima ciudad”.
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¿La razón? Porque su jugador preferido, Kevin Garnett, jugaba ahí y desde que entró al vestidor se motivó al ver su casillero.
“En ese de Boston, del entrenamiento y lo normal es que vas a una reunión con los dueños del equipo, con el entrenador, con todos los que toman las decisiones. Estaban Danny Ainge (presidente de operaciones), Doc Rivers (entonces entrenador de Celtics). Ese fue el año que le ganaron los Celtics a los Lakers el campeonato (2008). Kevin Garnett es mi jugador favorito de básquet y me acuerdo que llegando al locker room, veo el casillero de Kevin Garnett y me siento ahí, me sentí inspirado, tuve el mejor workout”, apuntó.
“Entro y me dice Danny Ainge, ‘otro UCLA Bruin’, porque uno de mis compañeros que estaba entrenando ahí tuvimos el mismo workout, Luc Mbah a Moute. Danny Ainge, 'me encantas, me encanta cómo juegas, tu intensidad’. Y Doc Rivers igual, te amamos, 'nos gusta tu tipo de juego, tú representas bien y cómo se juega aquí en Boston’”, confesó.
Y aunque no le aseguraron que lo seleccionarían en el Draft, existió una posibilidad. Cuando ya se estaba cambiando después de ese entrenamiento, un entrenador asistente le pidió que se quedara a otra práctica, pero después de que el mexicano lo consultó con su agente le recomendó irse al aeropuerto para volar a Oakland.
Se retira un grande...
— Soles de Mexicali (@clubsoles) August 26, 2020
¡Gracias por todo Lorenzo!
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“Habló con ellos (su representante) y le dijo que no podía y el jugador que sí decidió quedarse, que le preguntaron, fue al que escogieron en vez de mí en el Draft. Si me hubiera quedado a hacer ese workout, me hubieran escogido a mí en vez de a él (Semith Erden)”, contó.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.