Los Angeles Lakers en busca del anillo: ¿Es el mayor desafío en la carrera de LeBron James?

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LeBron James

LeBron James es la máxima estrella de la NBA. Desde su llegada a la liga como uno de los mejores prospectos de la historia del básquet universitario, LeBron debió rendir mil y un exámenes. Probablemente ninguno haya sido como el que enfrentará esta temporada, cuando se vea obligado a salir campeón con Los Angeles Lakers después de haber sumado a su estructura a Anthony Davis. La dupla tendrá múltiples desafíos en una liga plagada de incertidumbre después de que el mapa de candidatos sufriera múltiples modificaciones durante la última Agencia Libre. 

De cara a la inminente temporada 2019-20, en NBA.com analizamos todos los desafíos que ha tenido que afrontar LeBron durante su carrera y la exigencia -no la dificultad- de cada uno. 

Demostrar en la NBA 

The bubble burst on LeBron

Hasta Zion Williamson, nadie jamás había generado las expectativas que había despertado la versión universitaria de LeBron James. Nacido en Akron, fue elegido con el número uno del Draft 2003 por Cleveland Cavaliers. Las expectativas en torno a él eran mayúsculas y LeBron ya era una estrella a nivel nacional, en una época en donde no existían las redes sociales y la globalización de la liga, del deporte en general, eran apenas un sueño. 

LeBron cumplió las expectativas generadas a su alrededor. Promedió 20,9 puntos, 5,9 asistencias, 5,5 rebotes y 1,6 robos en 39,5 minutos por encuentro. Por su campaña recibió el premio al novato del año. Fue la primera de sus siete temporadas en Cleveland, donde concretó todo lo que había prometido durante su etapa universitaria. Fue seis veces All-Star, clasificó en cinco oportunidades a Playoffs e incluso lideró a los Cavs hasta las finales de 2007 con un plantel que no tenía nivel para alcanzar una final.

La caída frente a San Antonio Spurs y las decepciones en las dos temporadas siguientes provocaron su partida. LeBron promedió unos bestiales 35,3 puntos por partido en la postemporada de 2008-09 pero cayeron frente a Orlando Magic en las Finales del Este. Tras la derrota en 2009-10 a manos de Boston Celtics, decidió mudarse a Miami. LeBron había aprobado con creces y su imposibilidad de ganar un título había sido responsabilidad de una gerencia incapaz de construir un equipo a la altura del desafío. 

La primera temporada con Miami

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The Decision, un gran movimiento del marketing que LeBron utilizó para anunciar su mudanza a Miami Heat, convirtió a James en uno de los blancos de la NBA. En yunta con Chris Bosh y Dwyane Wade, el gran primer Big Three de la era moderna estaba obligado a ser campeón. Los fanáticos, y también varios especialistas, estaban preparados esperando su fracaso. Bajo las órdenes de Eric Spoelstra, Miami finalizó con el segundo mejor récord detrás de los Chicago Bulls de Derrick Rose. 

En postemporada, eliminaron en forma consecutiva a Philadelphia 76ers, Boston Celtics y a los propios Bulls para alcanzar las Finales de la NBA. Dallas Mavericks, con Dirk Nowitzki como buque insignia, eran sus rivales. Increíblemente, Miami cayó frente a los Mavs de Dirk por 4-2. El primer año de LeBron, Bosh y Wade terminó en decepción. LeBron promedió 26,7 puntos, 7,5 rebotes, 7 asistencias y 1,6 robos en 38,8 minutos. En Playoffs, su producción cayó un poco: 23,7 puntos, 5,9 asistencias, 8,4 rebotes, 1,7 robos y 1,2 tapas por partido. Criticados tras una primera experiencia sin éxito pero justificados por la dificultad de esamblar las nuevas piezas, Miami afrontaría una segunda temporada con aún mayor exigencia. 

Obligados a ganar

LeBron James Dwyane Wade

LeBron tenía una deuda. Se había mudado a Miami para salir campeón pero la primera temporada había terminado en decepción. En Florida querían el ansiado anillo, otra vez con Wade como protagonista, y finalmente lo consiguieron. Miami bajó en postemporada a New York Knicks, Indiana Pacers y a Boston Celtics en siete partidos para enfrentarse a Oklahoma City Thunder, el equipo joven que contaba con Kevin Durant, Russell Westbrook y James Harden en un mismo equipo. Tras la derrota inicial en el Chesapeake Energy Arena, Miami ganó los siguientes cuatro encuentros para coronarse campeón. 30,3 puntos, 9,7 rebotes, 5,6 asistencias y 1,9 robos de promedio de LeBron, cifras impresionantes para el ya coronado Rey de la NBA. 

James había cumplido su objetivo: había ganado el primer anillo de su historia. En 2012-13 repitieron su consagración: barrieron a Milwaukee Bucks, eliminaron a Chicago Bulls en semifinales del Este, dejaron en el camino a Indiana Pacers en siete partidos en las Finales de Conferencia y le ganaron el anillo en una final épica a San Antonio Spurs, también en siete partidos y tras el inolvidable tiro de Ray Allen en el sexto juego. 

En 2013-14, los Spurs del Beautifull Game se tomaron revancha y vencieron al Heat en la cuarta final que LeBron-Wade-Bosh habían alcanzado en igual cantidad de años. Tras la derrota, LeBron volvió a mudarse pero con el objetivo cumplido y dos anillos en su bolsillo. 

Darle un campeonato a Cleveland

LeBron James and Kevin Love celebrate after the 2016 Cavaliers became the first team in NBA history to win the NBA Finals after trailing 3-1.

Cuando LeBron se fue a Miami, el odio se propagó rápidamente por Cleveland: el hijo de la ciudad los había dejado para irse a buscar un título lejos de casa, con otras dos estrellas que se juntaban en un mismo equipo para cumplir un objetivo en común. Pero cuatro temporadas después, LeBron decidió volver. 

El objetivo era mayúsculo: darle a la ciudad el título postergado con una población resentida después de su partida. Con la obligación de ganar el anillo, regresó a Cleveland en 2014-15. La dificultad aumentó aún más cuando irrumpieron los Golden State Warriors, la mayor fuerza dominante de la NBA en las últimas décadas. Tras alcanzar las Finales de 2014-15 y ser derrotados por los Warriors, en la siguiente temporada lograron remontar la desventaja de 3-1 en las Finales frente a los propios Warriors y LeBron encontró la reivindicación total al darle a su ciudad el anillo con el que soñaban desde que lo Draftearon en 2003.

Las siguientes dos temporadas, Cleveland volvió a las finales gracias a la producción de un LeBron que en su última temporada llevó a su equipo hasta las Finales en un unipersonal absoluto: promedió 34 puntos, 9,1 rebotes, 9 asistencias, 1,4 robos y 1 tapas en 41,9 minutos. Con un plantel diezmado, LeBron estuvo a punto de hacer historia una vez más pero no pudo. Cuando decidió marcharse, ya no había odio: era todo agradecimiento.  

El primer año con Lakers 

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LeBron eligió a los Lakers como nuevo destino y el fracaso fue rotundo. Con 34 años, sufrió la primera lesión grave de su carrera justo cuando las piezas empezaban a encajar. Finalmente se quedaron sin Playoffs, una situación que LeBron no atravesaba desde 2004-05. El caos en la gerencia y el mal armado del plantel, sumado a la lesión de LeBron y las molestias que sufrieron también los jóvenes -Lonzo Ball y Brandon Ingram, principalmente- matizaron el dolor por la decepción pero fue resonante.

James no pudo devolverle a Los Angeles el protagonismo del cual los angelinos están sedientos y vieron por televisión como Toronto Raptors se consagró campeón de la NBA tras vencer a los Warriors en las Finales. ¿Y si hubieran sido los Lakers los que por fin bajaban a los Warriors? La respuesta ya no importa. 

En busca del anillo

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Tras el fracaso de la primera temporada, Los Angeles Lakers apostaron fuerte: transfirieron a todos los jugadores jóvenes que representaban su futuro para conseguir a Anthony Davis, uno de los jugadores más dominantes de la NBA. Con AD, a sus 35 años y con un plantel que tendrá que demostrar que pueden escoltar a las dos estrellas rumbo al título, LeBron James tendrá dos objetivos mayúsculos: conseguir el anillo que los Lakers no ganan desde 2009-10 e imponerse a Los Angeles Clippers en el clásico de la ciudad. LeBron sabe que no hay excusas y que, con casi 35 años, está a punto de embarcarse en el máximo desafío de su carrera. 

Las opiniones aquí expresadas no representan las opiniones de NBA ni de sus franquicias. 

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