¿A qué películas nos recuerdan los 10 personajes principales de los Chicago Bulls de "The Last Dance"?

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Cine

El estreno de The Last Dance y el ponerse al día con ese lado cinéfilo que muchos tenemos, han sido dos de los pasatiempos que nos permiten luchar contra el aburrimiento que puede generar una situación de aislamiento social como la que atravesamos a causa del coronavirus COVID-19.

Y sin necesitar más excusa que esa, decidimos hacer un mix de ambas propuestas, bajo un mismo concepto: ¿a qué película nos recuerdan los 10 personajes más importantes del documental sobre los Bulls de MJ? Desde el propio a Jordan, hasta Jerry Krause.

Las respuestas las encuentran a continuación.

Más | "The Last Dance": la guía con toda la información de la serie de Michael Jordan y los Chicago Bulls de la 1997-1998

Michael Jordan: Whiplash

(No, no vamos a elegir a Space Jam, sepan disculpar)

Whiplash, película dirigida por Damien Chazelle en el 2014 y ganadora de tres Premios Oscar, se enfoca en los sacrificios que debe realizar Andrew (Miles Teller) en su aprendizaje como baterista de una orquesta de jazz, mientras recibe el maltrato de su particular y violento profesor (J.K. Simmons). 

Todo el film se basa en ese concepto: los límites a los que el humano puede llegar, en su ambición por ser el mejor. ¿Cuántas relaciones estamos dispuestos a dejar atrás en ese camino?, ¿dónde se definen las barreras morales?, ¿el fin justifica los medios?

Lo cierto es que la dureza del profesor a la hora de tratar a su talentoso, pero inexperto alumno, nos recuerda bastante a la experiencia de MJ en North Carolina con Dean Smith.

Whiplash (¡spoiler alert!) termina con un Andrew fortalecido en sus convicciones y decidido a seguir por el durísimo sendero de la grandeza, cerrando con un inolvidable solo de batería. Los golpes habían logrado moldear al aprendiz, tal como lo hicieron con el escolta de los Bulls en su juventud.

No sabemos si eventualmente Andrew se transformó en el GOAT del jazz, pero sí conocemos el efecto que tuvo en Jordan esa estricta formación con Smith en los Tar Heels. Su mentalidad asesina, dispuesta a cualquier tipo de sacrificio en pos de cumplir el objetivo, se empieza a ver a la perfección en The Last Dance.

Scottie Pippen: El Padrino II

El mejor número dos de todos los tiempos. Poco más para agregar en la comparación.

Si bien en el uno encontramos al personaje más icónico de todos los tiempos, su complemento termina de elevarlo a un pedestal inalcanzable.

No hay MJ sin Scottie. No hay Vito sin Michael.  

Lo que nos lleva a...

Scott Burrell: El Padrino III

El "¿can I get a hug too?" (¿puedo tener un abrazo yo también?) de Burrell a Jordan, con la firme negativa de MJ, es probablemente el momento con mayor potencial de meme de los primeros dos episodios del Last Dance.

Viendo el amor que reciben sus predecesoras, probablemente al Padrino III también le gustaría llevarse algo de ese reconocimiento, solo para encontrarse con un golpe contra una pared tan fuerte como la que Jordan le puso a su nuevo compañero en París.

"No cuenta", también podría ser la respuesta de algún fanático de la familia Corleone, a la hora de hablar de la tercera parte de la trilogía.

Dennis Rodman: The Rocky Horror Picture Show

Rodman

Vestidos, maquillaje, excesos, un festín de colores, excentricidades, interacción con los espectadores y personajes completamente desquiciados, durante 100 minutos que nos guían en una montaña rusa de emociones y sensaciones.

La descripción le puede encajar perfecta a la película de culto dirigida por Jim Sharman en 1975, o a cualquier documental que narre la vida de Dennis Rodman a mediados de los '90. Y en ambas, dentro de la locura, podemos rescatar momentos de genialidad. 

Steve Kerr: John Wick

Estábamos barajando distintas posibilidades relacionadas a grandes tiradores de la historia del cine. Pero esta foto de Kerr junto a sus perros, nos terminó de decidir por John Wick, personaje interpretado por Keanu Reeves, que se monta en una ola de disparos para vengar la muerte de su mascota.

Creemos que el bueno de Steve es mucho más pacífico que Wick, pero el tirador más certero de la historia de la NBA, merecía su comparación con un pistolero de ese nivel.

¿Personajes unidimensionales, con una sola función? Sí, pero tremendamente efectivos en su tarea.

Ron Harper: Horrible Bosses

Suponemos que Harper nunca ideó ningún plan macabro para deshacerse de su jefe como Jason Bateman, Charlie Day y Jason Sudeikis en Horrible Bosses... pero después de ver el (mal)trato de Jordan en los primeros capítulos de The Last Dance, seguramente no le habrán faltado las ganas.

Y si tenemos en cuenta que luego de Chicago tuvo que convivir con Kobe Bryant en los Lakers, la secuela ya está garantizada. 

Toni Kukoc: Andrei Rublev

Si Toni Kukoc fuera una película, definitivamente sería una de cine arte europeo. Y que mejor que Andrei Rublev, designada por The Guardian como la mejor de todos los tiempos dentro de ese movimiento.

El cine de Andrei Tarkovsky, como el juego de Toni Kukoc, no es para cualquiera. Es lento, falto de explosiones y sin la espectacularidad de sus pares norteamericanos, al menos desde los estándares tradicionales. Un observador casual podría incluso tildarlo de aburrido.

Sin embargo, detrás de ese ritmo cansino, se esconden capas de un virtuosismo técnico excepcional y un talento tan singular como revolucionario.

Toni Kukoc, Andrei Rublev. Arte en movimiento.

Luc Longley: La caída del Imperio Romano

El cine épico, ese de las producciones inmensas, los cientos de actores en escena y los grandes planos generales, probablemente haya encontrado su punto más destacado entre 1955 y 1965, con películas como Los Diez Mandamientos, Ben Hur, Jason y los Argonautas, Espartaco, Lawrence de Arabia y Cleopatra.

Aunque claro, ese período también nos dejó La Caída del Imperio Romano, con Sophia Loren.

Si bien no se la puede calificar como una mala película, claramente el tamaño de su producción no se terminó correspondiendo con el producto final, a pesar de tener a su disposición un  exorbitante presupuesto de casi 20 millones de dólares.

La Caída del Imperio Romano tenía el tamaño de sus épicas contemporáneas. O incluso más. Lo que no tenía era el talento.

La historia encuentra paralelos claros con Longley, un interno australiano de 2,18 metros que, en los papeles, tenía chances de sumarse a la Era Dorada de pivotes que habitaban los '90: Patrick Ewing, Shaquille O'Neal, Hakeem Olajuwon, David Robinson, Alonzo Mourning, Dikembe Mutombo y tantos más.

Longley tenía todas las herramientas disponibles como para sumarse a ese grupo. Pero sin ser necesariamente un mal jugador, lo que no tenía era el talento para estar a la altura de sus colegas... aún cuando era tan o más grande que ellos.

Phil Jackson: Easy Rider

Jackson

Phil Jackson entró a la NBA en la temporada 1967-1968. Exactamente al mismo tiempo que se rodaba Easy Rider o Busco Mi Destino, película que dio inicio a la era del conocido como Nuevo Hollywood, en tiempos de plenitud del movimiento hippie.

Pero más allá de las fechas, es realmente imposible no trazar un paralelo entre esta lisérgica historia de viajes en moto y las andanzas de un joven Jackson, relatadas en varios de sus libros.

El entrenador ha nombrado a "Zen and the Art of Motorcycle Maintenance", un libro de 1974 que narra un viaje ficcional en moto desde Minnesota hasta California, como el de mayor influencia en su vida y ha dejado otras frases que reflejan su amor por las dos ruedas.

"De chico leía a Robinson Crusoe y la última vez que tuve un año libre, decidí viajar al Pacífico Sur, aunque me di cuenta durante el viaje que ya no estaba preparado físicamente para hacerlo. Quizá ahora vuelva a esas cosas, a esas aventuras. Una de mis historias favoritas es la de un hombre que cruzó el mundo, de este a oeste, de norte a sur, en motocicleta. Esas son las cosas que me interesan", declaró al momento de su retiro como entrenador.

¿Su despedida de la prensa en Chicago, tras el título de 1998 y su salida de la franquicia? En una Harley-Davidson.

Born to be wild.

Jerry Krause: Avengers - Infinity War

Krause

El universo de superhéroes de Marvel encuentra por fin el choque ante su gran villano, en las últimas dos entregas de la saga. Thanos es un villano clásico, con un plan malévolo para desintegrar (literalmente) al 50% de la población mundial y reconstruir una humanidad que considera ha superado la capacidad de recursos del planeta.

Algo así como un tanking interplanetario, soñando con un mejor futuro en el largo plazo.

¿Un villano clásico contra un equipo de superhéroes?, ¿reconstrucción?, ¿comienzo de cero?... ¡y hasta seis piedras preciosas en su mano, como muestra de su poder!

Cualquier similitud con ese particular personaje llamado Jerry Krause y su intento de reseteo en Chicago, es pura coincidencia.

PD: No creemos en los chistes fáciles y por eso evitamos las bromas con "Get Shorty", "Antman", "Querida, Encogí A Los Niños" y demás. Para eso ya está el propio Jordan.

Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.

Autor/es
Juan Estevez Photo

Juan es productor de contenido en las ediciones en español de The Sporting News.