Sabemos que los equipos veteranos suelen tomarse las pretemporadas con mucha calma y jugarlas con el freno de mano puesto. Sin embargo, es imposible que lo mostrado por los Clippers en estos tres partidos de preparación no levante cuanto menos, ciertas dudas sobre el presente del equipo. Y es que después de caer claramente en dos ocasiones ante unos Lakers sin LeBron James ni Anthony Davis, este jueves sumaron su tercera derrota consecutiva, siendo superados por el Utah Jazz por 125-105.
Para los de Lue se trató del último amistoso previo al debut en la 2020-2021, en la noche del 22 de diciembre, nuevamente ante sus rivales Lakers. El 0-3 de la pretemporada prende una señal de alarma, más allá del escenario poco competitivo de estos juegos. Porque lo cierto es que los angelinos han mostrado muy poco, sea entre sus titulares o entre sus relevos. Y aún si están regulando, no deja de ser una lectura preocupante, teniendo en cuenta que fue justamente eso lo que complicó su química en la campaña anterior.
Ejemplo de esto es que sus cinco titulares terminaron la suma de estos tres compromisos con un +/- negativo: -6 para Kawhi Leonard, -2 para Paul George, -18 para Ivica Zubac, -17 para Nicolas Batum (reemplazando a Marcus Morris en el cuadro inicial) y -8 para Patrick Beverley. Veremos qué significa una vez que comiencen los partidos oficiales, pero los números marcan a las claras que el 0-3 no se explica desde un bajón cada vez que salen sus nombres principales, sino que también se han visto superados cuando usaron a sus figuras.
En este partido en particular, vimos a un conjunto completamente laxo en su concentración defensiva, especialmente a la hora de marcar el perímetro. Lo de Utah con el tiro de tres fue un vendaval: 24 conversiones sobre 52 intentos. Gran mérito del Jazz, pero también evidentes problemas en la marca de los de Lue.
here's a bunch of threes if you're into that sort of thing pic.twitter.com/z9Vkq7UDF8
— utahjazz (@utahjazz) December 18, 2020
¿Puntos positivos en la presentación de los californianos? No demasiados. Hubo 16 puntos y 5 asistencias de Paul George, seguido por 13 tantos para Kawhi Leonard y Luke Kennard. Muy poco, dentro de un contexto opaco y al que esperan darle un giro de 180 grados a partir de la semana que viene.
La otra cara de la moneda es lo de Utah, que cerró la pretemporada con registro de 3-0 (había vencido en dos ocasiones a Phoenix), con un lucimiento ofensivo extraordinario: promediaron 118,3 puntos y 17,6 triples convertidos por partido. Para poner en contexto, los 24 tiros de tres que encestaron este jueves hubieran sido máxima en la historia de la franquicia en un encuentro de Fase Regular (el tope es 22, conseguidos ante Denver en Disney, algunos meses atrás).
El movimiento de balón de los de Snyder fue de un nivel superlativo, terminando la noche con 38 asistencias: 8 de Donovan Mitchell, 5 para Royce O'Neale, 5 para Derrick Favors... hasta Rudy Gobert se sumó con 3. La mano caliente de los tiradores ayudó a esos valores: hubo 5 triples de Bojan Bogdanovic, 5 de Jordan Clarkson, 4 de Mike Conley, 3 de Donovan Mitchell... pero también es cierto que muchas de esas anotaciones llegaron abiertas, justamente gracias a la calidad de pases lograda.
20 points off the bench and 5 triples for JC 🧺#PerformanceLeader | @UofUHealth pic.twitter.com/QpbDaGrpIR
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El Jazz tuvo a cinco jugadores en doble dígito: 20 para Clarkson y Bogdanovic, 15 para Mitchell, 12 para Gobert y Conley. Sin que ninguno pase de los 26 minutos en campo.
Utah llega a la 2020-2021 con un impulso más interesante y confirmando en esta pretemporada algo que ya se desprendía desde su armado: han conseguido juntar una de las rotaciones de ocho hombres más sólidas de toda la liga, con la vuelta de un Derrick Favors que encaja perfecto en lo que necesitaba el equipo. A prestarle mucha atención a los de Salt Lake City a la hora de hablar de potencias en el Oeste... su dominio ante los Clippers de esta noche, fue una prueba de ello.
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