Dentro de los problemas que ha tenido Golden State Warriors a lo largo de la temporada, el caso de James Wiseman se pone en la parte alta de la lista de cuestiones complicadas y dolorosas. La franquicia lo eligió en el 2° lugar del Draft 2020 y apuesta fuerte en su potencial como pivote del futuro. Y si bien es un talento con mucho por desarrollar, su año rookie no sólo ha estado marcado por múltiples problemas y algunas irregularidades en su juego propias de su juventud, sino que ha terminado antes de tiempo.
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Y es que el interior de 20 años se perderá lo que resta de la temporada tras pasar por el quirófano para reparar una rotura de meniscos en su rodilla derecha. La cirugía fue realizada este jueves en el Cedars-Sinai Kerlan-Jobe Institute de Los Angeles, a cargo del Doctor Neal ElAttrache. La franquicia comunicó que el jugador comenzará de inmediato con su rehabilitación y se espera que regrese para la 2021-2022, aunque un detalle del parte oficial despierta otro posible problema: se actualizará su estado en septiembre, por lo que podría perderse, como mínimo, una parte del próximo training camp.
Warriors center James Wiseman underwent successful surgery today to repair a right meniscal tear: pic.twitter.com/ncZO49Iwdv
— Warriors PR (@WarriorsPR) April 15, 2021
Una situación para nada ideal y que, de cierta manera, lo complicó para su año rookie, ya que se perdió un tramo de la etapa de entrenamientos por cuestiones del protocolo de salud y seguridad. No sólo eso, sino que durante el curso también estuvo de baja unas semanas por un problema en una muñeca, además de pasar unos días más por el protocolo.
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"Ha sido una temporada dura para todos en cuanto a no tener Summer League y, en su caso, tampoco un training campo por los protocolos de salud y seguridad. Todos han atravesado situaciones y problemas similares, y en ese contexto creo que ha tenido una temporada de rookie productiva para alguien que prácticamente no había jugado en la Universidad. Salir de inmediato y mostrar lo prometedor que es fue bueno", analizó Kerr, quien mira hacia adelante: "Creo que tiene un futuro brillante, pero está claro que tiene mucho por trabajar aún. Es genial que haya tenido toda esta experiencia. Ha sido un gran estudiante, con paciencia. Tuvo que atravesar un montón este año y lo manejó bien".
El año de novato de Wiseman se cerró con 39 partidos jugados (27 como titular), con promedios de 11,5 puntos (51,9% campo, 31,6% triples, 62,8% libres), 5,8 rebotes y 0,9 tapones en 21,4 minutos por encuentro.
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