Decir que Houston ganó apenas cuatro de sus 11 partidos en lo que va de la 2018-2019 y que hoy por hoy se encuentra fuera de la zona de playoffs es una sorpresa, ya que hablamos de un equipo que unos meses atrás estuvo a muy poco de eliminar a Golden State y de avanzar a las Finales. Pero la realidad es que el conjunto de Mike D'Antoni no le encuentra la vuelta a este inicio de campaña. No sólo por sus problemas defensivos, algo que se viene marcando desde el primer día. Curiosamente, su ataque, esa marca registrada que lo llevó al mejor récord de la última fase regular, también está fallando.
Primero, vale un repaso por la 2017-2018. En el camino a sus 65 victorias, los texanos desfilaron de la mano de la mejor ofensiva de la liga en cuanto a rating ofensivo (114 puntos cada 100 posesiones). Fueron el segundo equipo en cuanto a promedio de anotación (112,4 por juego), y el que más triples anotaba (15,3 por encuentro).
Ahora bien, la 2018-2019 muestra números completamente opuestos, y la caída en el rendimiento es muy clara.
| Temporada | Promedio de puntos anotados | Rating Ofensivo | Triples anotados | % de campo |
|---|---|---|---|---|
| 2017-2018 | 112,4 (2° en la NBA) | 114 (1°) | 15,3 (1°) | 46% (15º) |
| 2018-2019 | 101,5 (29° en la NBA) | 103,1 (27°) | 13,3 (3°) | 41,3% (30º) |
Los 80 puntos anotados en la derrota del jueves ante Oklahoma City se tratan de la marca más baja desde el 6 de febrero de 2016 (79 contra Portland). Y lo sucedido en la noche del sábado ante los Spurs (caída por 96-89) potenció la tendencia. Fue la sexta vez en estos 11 partidos de la 2018-2019 que los Rockets anotaron menos de 100 tantos, algo que en toda la 2017-2018 pasó sólamente 8 veces. Es más, la quinta de esas 8 recién llegó en febrero, después del All-Star Game.
La salida de algunas piezas clave (como Ariza), la ausencia de Harden y Paul por diferentes motivos (lesión y sanción), el bajo nivel de Carmelo Anthony... Se pueden buscar varios motivos para explicar el flojo nivel ofensivo de los Rockets. Pero ninguno alcanzará para evitar la sorpresa, ya que se trata de un equipo con capacidad para hacerlo mejor más allá de las circunstancias.
"Nuestra ofensiva es anémica", había dicho D'Antoni hace unos días. ¿Podrán empezar a recuperarse este domingo contra Indiana?