Aunque quizás sea una parte menos reconocida y, sobre todo, complicada, las faltas en ataque suponen uno de los elementos del juego de mayor polémica. Encienden y llenan de ira a los atacantes, tanto al jugador que la comete como a compañeros y afición, y levanta a plena fuerza al rival, más motivado que nunca por ver como su enemigo pierde la posesión y suma una personal.
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Las faltas en ataque crean controversia por su criterio, por el flopping que puede existir por el medio y alguna discusión anterior, alimentados con el paso de los años y los cruces en momentos calientes. Masterizar este recuerso para saber sacar faltas en ataque al rival es muy complicado. Suelen pitarse pocas de estas acciones en cada encuentro, por lo que disponer de un verdadero especialista es complicado.
Eso sí, la parte de estadísticas de NBA.com brinda todo tipo de recursos para conocer mejor el juego. Entre las cifras encontramos las de faltas en ataque conseguidas, ya sea más por casualidad o calidad, aunque desde luego, si un jugador repite todos los años, de casual no tiene nada.
5 - Derrick White (San Antonio Spurs)
Puede sorprender el quinto puesto para el escolta de los Spurs. Este jugador de 26 años tiene todavía mucho que ofrecer, pero al igual que todos los jugadores del equipo atraviesan un momento de duda. Los cambios son inexorables en Texas por mucho que tarden en llegar, y Derrick White es una de esas piezas que podría ofrecer mucho más con un peso mayor.
La 2019-2020 supone su primera temporada por encima de los dobles dígitos de promedio de puntos (10,4) y siempre ha destacado por su ofensiva. White es capaz de generar juego, atacar el aro y encontrar a sus compañeros. Una versión marca blanca de Manu Ginóbili para hacer de sexto hombre. Tiene un fiable tiro exterior y, ahora sí, la defensa está infravalorada.
Además de que White es el quinto jugador en faltas ofensivas forzadas por partido (0,31), es cuarto en las totales forzadas (19). Los que lo hayan visto poco pensarán que es una debilidad atrás, pero nada más lejos de la realidad. Muy activo de manos e inteligente. Le queda la 2020-2021 bajo contrato por 3,5 millones de dólares.
4 - Kemba Walker (Boston Celtics)
Sorprendente, ¿verdad? Walker es un base con problemas en defensa que en su etapa en Charlotte Hornets dejó muchas imágenes de pasividad. Siendo más joven le gustaba menos aplicarse atrás y su esfuerzo diferencial siempre ha estado en el ataque. Eso sí, con los años ha sabido colocarse mejor y utilizar su inferior peso para forzar faltas.
Kemba es posiblemente el peor defensor de la lista, o al menos el más expuesto al ser también titular, jugador de más de 30 minutos por noche y All-Star en repetidas ocasiones. Tiene ese toque, esa inteligencia y posicionamiento para frustar a ciertos rivales en momentos concretos, pero como defensor sigue por debajo de la media. Hay mejora desde sus años en Charlotte, eso sí. Estar en Boston ayuda.
Se sitúa tercero en faltas ofensivas forzadas por partido (0,36), pero el haberse perdido tramos lo deja como el séptimo en totales (18). Problemas defensivos y una ventaja que tratan de aprovechar los contrincantes, pero su capacidad para sacar faltas en ataque está a la altura de pocos guardias. Un poco floppero en ocasiones.
3 - Mo Wagner (Washington Wizards)
La otra gran debilidad defensiva de la lista. Si Wagner queda una posición por encima de Walker se debe a que es, en estos momentos, el único jugador que se acerca a los dos primeros puestos en cargas totales. Wagner suma 26, aunque en promedio queda fuera del top 10. Es más joven que Kemba, juega menos y lo hace con los suplentes. Sufre atrás, pero esconderle es más sencillo.
El caso del alemán es curioso. Es uno de los mejores pivotes ofensivos desde el banco de la liga, pero al lado de Davis Bertans y en unos Wizards con alergia defensiva, es imposible rendir atrás. Futuro interesante el que proyecta Moritz, un cinco ofensivo, con tiro exterior y muy, muy inteligente.
2 - Montrezl Harrell (LA Clippers)
Motor al 100% de rendimiento, eso es Montrezl Harrell. Segundo jugador en promedio de faltas forzadas (0,48) y primero, empatado con Kyle Lowry, en totales (30). Tiene el físico, la energía y la astucia, y esto último se antoja fundamental para sacar faltas en ataque.
Harrell y Lowry son los dos mejores defensores de la lista, además de figuras que suman victorias para sus equipos. Harrell es el anotador de banco, ese ejecutor ideal al lado de Lou Williams cuya facilidad para convertir cerca del aro es hasta hipnótica. Atrás tiene más trabajo que fundamentos, aunque hay que decir que su evolución desde Louisville, cuando jugaba en NCAA, es sorprendente. Nadie daba un centavo porque Harrell llegase tan lejos y se convirtiese en pieza de tanto valor.
1- Kyle Lowry (Toronto Raptors)
Los Playoffs de 2019 y el título sirvieron para que Lowry callase muchas voces críticas sobre su rendimiento en postemporada. El base estuvo muy certero como escudero de Kawhi Leonard. Fino en defensa, extraordinario -como acostumbra- en la generación de juego y ciertamente efectivo en el tiro.
Lowry es el rey de la NBA en lo que a forzar faltas en ataque se refiere. Quizás solo Marcus Smart le compite las capacidades, aunque el de Boston recurre más al flop y la estadística no brilla tanto en su caso. Kyle es muy serio atrás. Un veterano que se las sabe todas y al que todavía le queda combustible en las piernas. Harrell y Lowry suman cada uno 30 faltas ofensivas forzadas en la 2019-2020, la cifra más alta seguida de las 26 de Wagner. Por detrás suyo los que más se acercan son White, PJ Tucker y Ryan Arcidiacono, todos ellos con 19.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.