Mientras espera por James Harden, Brooklyn Nets no le dio chances a New York Knicks

Author Photo
Durant

En una jornada donde la mayor noticia alrededor del equipo pasó por el megatraspaso que los dejó con James Harden en sus filas, los Brooklyn Nets también salieron a la cancha y a pesar de las bajas, lo hicieron con enorme solvencia: vencieron a unos desdibujados New York Knicks por 116-109, quedando con marca de 7-6 en el certamen. New York cayó a 5-7. Resultado final mentiroso, con los locales bajando la difernencia en los minutos basura, luego de que la misma oscilara entre los 14 y los 18 tantos durante buena parte de la segunda mitad.

Más | Cinco conclusiones rápidas que nos deja el traspaso de James Harden a Brooklyn Nets

Con solo nueve jugadores disponibles y rodeado en la formación titular por Bruce Brown, Joe Harris, Jeff Green y DeAndre Jordan, estaba claro que Kevin Durant tendría que asumir con una enorme porción de la carga ofensiva de los Nets. Algo que podía despertar algunas dudas, al tratarse de su primera actuación en noches consecutivas desde su regreso a las canchas. Bueno, no solo KD disipó rápidamente cualquier interrogante, sino que tuvo una actuación brillante para seguir sumando en lo que está siendo su gran arranque de 2020-2021.

Durant terminó la noche con 26 puntos, 6 asistencias, 3 rebotes, 2 tapas, 10-18 de campo y 3-5 en triples en 30 minutos de acción.

Durant

Las sensaciones para el ex Warriors no podrían ser mejores y están excediendo cualquier expectativa que pudiera haber hasta hace algunas semanas. No solo por estar manteniendo las estadísticas de sus mejores años, sino por lo bien que luce en el campo y la confianza que ya tiene su equipo en utilizarlo por encima durante más de 30 minutos partido (entró a esta noche promediando 34,8 y jugó menos simplemente por la diferencia en el marcador).

Brooklyn solo tenía nueve jugadores disponibles y todos tuvieron su aporte, superando o estando muy cerca del doble dígito en algún rubro: 15 puntos para Joe Harris y Bruce Brown, 13 para Timothe Luwawu-Cabarrot y Landry Shamet, 11 para Jeff Green y Reggie Perry, 12 rebotes para DeAndre Jordan y 7 asistencias para Chris Chiozza.

Por los Knicks lo mejor pasó como casi siempre por la tarea de Julius Randle, quien finalizó la noche con 30 puntos, 7 rebotes, 5 asistencias y un 13-25 de cancha. Además, RJ Barrett enderezó la puntería tras un muy mal comienzo y terminó con 20 tantos, mientras que el novato Immanuel Quickley se lució con 19 puntos en 22 minutos.

¿En el debe? Principalmente Austin Rivers: 8 puntos, 3-10 de cancha, en lo que fue apenas su segundo partido como titular en la campaña.

Por otro lado, en los Knicks se produjo el regreso del rookie Obi Toppin, recuperado de su lesión en la pierna derecha. Sin embargo, se vivió una situación curiosa, en la que apenas ingresó 57 segundos en la primera mitad, antes de ser reemplazado por Thibodeau sin una aparente lesión. Toppin no volvió a entrar de nuevo y se lo vio en el banco, sin recibir tratamiento ni atención médica. Extraño.

Con esta caída, New York acumula cuatro derrotas en fila y tras ese inicio positivo de 5-3, se está viendo el equipo que se esperaba: uno sin demasiadas variantes en ataque, carente de tiradores y con un básquet que no parece estar acorde con la modernización del juego. Si no hay ajustes, todo será cuesta arriba para los neoyorquinos durante la 2020-2021.

Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.

Autor/es
Juan Estevez Photo

Juan es productor de contenido en las ediciones en español de The Sporting News.