El Miami Heat jugó un gran partido en conjunto y se recuperó de la cerrada derrota ante Toronto, venciendo a los Boston Celtics por 112-106, en un juego que controló durante prácticamente la totalidad del mismo (acabó al frente en cada período), más allá de las diferencias normalmente acotadas.
El triunfo tiene doble valor para Miami, teniendo en cuenta que no pudo contar con su jugador ofensivo más determinante: Jimmy Butler se perdió el compromiso, debido a una torcedura en su tobillo derecho. Spoelstra subió la altura de la alineación titular, incluyendo a Kelly Olynyk en la misma y corriendo a Jae Crowder a la posición de alero.
La victoria del Heat aprieta la carrera por el tercer lugar de la Conferencia Este: la brecha entre ambos equipos ahora es de apenas un partido y medio, con Boston teniendo marca de 44-23 y Miami de 43-25. Ambos aún tienen cinco seeding games pendientes.
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Dominio perimetral
Una de las grandes diferencias del encuentro pasó por la eficacia de uno y otro desde el perímetro. Los de Spoelstra terminaron anotando 15 triples sobre 43 intentos, para un aceptable 35% de eficacia. Boston, en cambio, lanzó 10 de 33 (30%), incluyendo un 0-10 entre Gordon Hayward y Jaylen Brown.
Los 15 triples del Heat no solo estuvieron vinculados a la calidad de sus tiradores, sino también a un movimiento de balón que ya es marca registrada y que se vio potenciado por la cantidad de minutos que pasaron en cancha Kelly Olynyk (8 asistencias, además de 15 puntos y 6 rebotes) y Andre Iguodala (4 asistencias). Como de costumbre, el trabajo de ambos para encontrar a sus compañeros fue espectacular y ayudó a compensar la falta de un anotador clave como Butler.
Claro que más allá de ese juego de pases, luego había que anotar los lanzamientos y dos hombres en particular del ganador respondieron a ese llamado. Tyler Herro trajo 11 puntos desde el banco con un 3-7 en triples, mientras que Duncan Robinson se recuperó de su partido para el olvido ante Toronto (3 puntos, 1-5 de campo) convirtiendo 5-11 triples y sumando 21 puntos.
Robinson fue especialmente importante con un par de bombas en el cierre para mantener a raya a los Celtics, sumándose a un buen último parcial de Goran Dragic, quien acabó con 20 puntos (7 en el cuarto). El esloveno terminó abandonando el campo con una torcedura de tobillo, pero la misma no es de gravedad.
You can't hit a three-pointer more perfect than this:
— x - Miami HEAT (@MiamiHEAT) August 5, 2020
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Adebayo, dueño de la pintura
De todas maneras, Miami no solo vivió del triple, sino que a eso le agregó un excelente partido de Bam Adebayo en el juego interior. Ante la falta de Butler, Adebayo ayudó a mantener la normal frecuencia de tiros libres del equipo, yendo nada menos que 18 veces a la línea de libres (máxima de su carrera). Y si bien solo anotó 11 de esos disparos, fue una amenaza constante para la defensa de Boston.
El dominio de Bam llegó a su tope durante el cierre del segundo cuarto, cuando Stevens recurrió a una formación de micro-ball, en la que Jayson Tatum pasó a jugar de pivote. ¿El resultado? Tres idas a la línea prácticamente consecutivas para el interno surgido de Kentucky, para llevar la distancia al doble dígito (+12 al entretiempo).
Adebayo acabó el juego con 21 puntos y 12 rebotes, ganándole claramente el duelo personal a cada uno de los hombres grandes que Boston puso en cancha.
Sin respuestas ante la zona
Otro de los factores decisivos del encuentro fue la defensa zonal que propuso Miami durante buena parte del mismo. Los Celtics tuvieron serios problemas para atacar a esa 2-3 a la que suele recurrir Spoelstra y que encuentra en jugadores como Derrick Jones, Andre Iguodala y Jae Crowder una excelente primera línea.
Mientras va recuperando poco a poco al mejor Kemba Walker (15 puntos en 27 minutos), Boston tuvo buenos rendimientos de sus Jays: Jayson Tatum acabó con 23 puntos y 7 rebotes, mientras que Jaylen Brown sumó 18 tantos y 10 tableros. Además, Gordon Hayward totalizó 15 unidades y 7 rebotes.
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