Los St. Louis Hawks y el traspaso de Bill Russell a Boston Celtics, ¿qué sacaron a cambio?

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st louis hawks 1958

El Draft de 1956 es uno de esos momentos que cambió la NBA. Son muchos los episodios que pueden seleccionarse como claves, pero puntos de inflexión hay menos, y sin duda esa noche del 30 de abril en Nueva York es uno de ellos. ¿Por qué? Por el traspaso de Bill Russell a los Boston Celtics.

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Mucho hemos hablado sobre aquellos Celtics, Russell, Auerbach o incluso su rivalidad con Philadelphia en el objetivo de cortar la mayor dinastía de la historia del básquet. Hoy, sin embargo, el foco se sitúa al otro lado, en los perdedores del movimiento de 1956, los St. Louis Hawks, hoy en día Atlanta Hawks.

¿Por qué los Hawks pasaron de elegir a Bill Russell?

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St. Louis tenía un prometedor equipo cimentado en el joven interior Bob Pettit, un cuatro-cinco de 2,06 metros con una calidad ofensiva impresionante. Apenas tenía 23 años y en la 1955-1956, su segundo curso en la liga, promedió 25,7 puntos y 16,2 rebotes para guiar a los Hawks a las Finales del Este.

Auerbach estaba enamorado de Bill Russell y quería hacerse con él a toda costa. La intervención del propietario de los Celtics, Walter Brown, fue clave para disuadir a los Royals de elegir a Russell con la primera elección, y así Red pudo negociar con los Hawks el traspaso de Russell una vez estos lo habían seleccionado con el segundo pick.

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Lo cierto es que St. Louis podría haber emparejado a Pettit y Russell juntos para formar una dupla dominante en la liga. Mientras Pettit pondría los puntos, Russell sería el anlca defensiva y el punto de equilibrio en ataque gracias a su comprensión del juego, por no hablar del dominio que hubiesen impuesto en los tableros. Sin embargo, los Hawks optaron por el traspaso que propuso Boston y buscaron otro interior en ese mismo Draft.

Su idea fue un juego interior en el que Pettit fuese la estrella y tuviese dos acompañantes de nivel. Ya en la 1955-1956 era Chuck Share, un buen pivote, pero a años luz de lo que sería Russell. En una de las últimas elecciones consiguieron a Willie Naulls, que realmente era un alero al que situaban de cuatro y en ocasiones de cinco. Terminó siendo All-Star y campeón con Boston, ya que apenas jugó 19 partidos con los Hawks hasta que lo traspasaron el 26 de octubre de ese mismo año a los New York Knicks por el veterano base Slater Martin.

Martin fue muy importante en el cierre de aquel curso y en las dos siguientes temporadas, ya en su última como profesional, la 1959-1960, perdió algo de peso en la rotación. Esos Hawks dirigidos por Alex Hannum orbitaban alrededor de Pettit, el juego colectivo y mucho talento ofensivo exterior, pero les faltó siempre algo de tamaño para imponerse en más Finales.

¿Qué recibió St. Louis por Russell?

Fueron dos jugadores. Uno de ellos, veterano y cara conocida en la ciudad: Ed Macauley. Este interior de 2,03 metros era visto como el otro complemento para Pettit junto a Share. Tuvo un pico muy alto de juego en sus tres primeras temporadas en Boston, pero el paso de los años lo relegó a un rol más complementario pese a seguir siendo All-Star. Macauley estuvo tres temporadas con los Hawks antes de retirarse al término de la 1958-1959 por lesiones, aunque en su segundo año ya perdió minutos y la regresión en su juego era evidente.

La otra pieza sí que fue de mayor utilidad para la franquicia. Se trataba del joven Cliff Hagan, un alero de poco más de metro noventa que brilló en Kentucky y fue seleccionado por los Celtics con el pick 13 de la 3º ronda de 1953. Su entrada a la NBA se retrasó por cumplir el servicio militar, y al llegar fue inmediatamente traspasado junto a Macauley en dirección St. Louis.

Hagan apenas jugó el primer año, pero todo cambió a partir del segundo. Entre 1957 y 1962 fue la estrella exterior acompañante de Pettit y promedió 22,7 puntos, 9,8 rebotes y 4 asistencias en 35,8 minutos, con cinco selecciones para el All-Star y dos presencias All-NBA. Permaneció cuatro años más en St. Louis, hasta 1966, ya en un rol complementario de 24,7 minutos por noche. Es el tercer jugador con más Win Shares en la historia de la franquicia por detrás del propio Pettit y de Dominique Wilkins.

El título de 1958

Hannum en el banco y una rotación formada por Pettit, Slater Martin, Jack McMahon, Macauley, Chuck Share y Jack Coleman llevó a los Hawks a las Finales de la NBA tras vencer a los Minneapolis Lakers en las Finales del Oeste (3-0). ¿Y a quién se encontraron? Por supuesto, a los Celtics de Auerbach, Russell y Bob Cousy, que celebraron el primer título de su historia al vencer en el Juego 7 por tan solo dos puntos (123-125).

Las mismas Finales se repetirían en 1958, aunque esta vez Hagan ya estaba en la rotación de Hannum como pieza importante. El punto clave fue que Russell sufrió una lesión en el tobillo durante el Juego 3 que limitó su impacto en la serie. Los Celtics igualaron la serie sin su estrella, pero cedieron en el quinto. Ya en el Juego 6, Russell hizo un esfuerzo y jugó 20 minutos, cuando lo normal es que sano hubiese disputado el encuentro al completo.

Los Hawks ganaron así el único título de su historia con el gran asterisco de qué hubiese sucedido de no lesionarse Bill Russell. Sin la fuerza defensiva de Boston, Pettit destrozó a los verdes con 33 puntos y 21 rebotes en el J5, y 50 puntos y 19 rebotes en el último.

Es evidente que, pese al título del 58, los Hawks perdieron el traspaso de la noche del Draft de 1956. Lo que hubiesen conseguido juntos Pettit y Russell quedará como uno de los "y si" más interesantes de los albores de la NBA, aunque sabemos de sobra lo que consiguió el pivote afroamericano junto a Auerbach en Boston: someter la liga durante una década. Es imposible dejar de lado que los Hawks realizaron el movimiento por la segregación que existía en la ciudad, mientras que el entrenador de los verdes no dudó en realizar una apuesta por un jugador afroamericano que muchos criticaron.

Para terminar, un apunte más. En el Draft del 56 no solo se hicieron con Russell: Tom Heinshohn fue elegido con la elección territorial y KC Jones, compañero de Russell en la NCAA en San Francisco, llegó con el pick 9 de 2º ronda. Se antoja casi imposible realizar una noche de tal nivel, al conseguir tres jugadores que son recordados entre los mejores de la historia de la franquicia.

Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.

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